Actividades para desarrollar la creatividad en los niños

Las actividades para desarrollar la creatividad ayudan a los más pequeños a potenciar sus capacidades para transitar nuevos caminos, encontrar soluciones diferentes y adoptar nuevos puntos de vista. 

La creatividad se puede estimular desde sus primeros años, de hecho, durante esta etapa es recomendable enseñarles a pensar de una manera creativa tanto en el colegio como en su vida diaria.

En Newton College sabemos de la importancia que tiene la creatividad para su desarrollo personal, por eso estimulamos a nuestros alumnos a diario, mediante actividades especialmente orientadas a reforzar sus capacidades. 

 

La importancia de potenciar la creatividad en niños

 

La creatividad es muy importante para que los más pequeños empiecen a pensar por sí mismos. Interpretar el mundo que les rodea y aportar soluciones adecuadas en cada circunstancia comienza con un pensamiento creativo desarrollado. 

Todas las situaciones en las que deben desenvolverse en su día a día van a requerir respuestas creativas, desde sus relaciones interpersonales con otros niños, hasta las respuestas emocionales que requiere el entorno familiar. Si aprenden a actuar en base a comportamientos creativos, serán capaces de manifestar sus pensamientos y emociones de una manera más sana y estarán más protegidos ante la frustración que en ocasiones producen los cambios. 

 

Actividades para desarrollar la creatividad

 

Al igual que otras capacidades, la creatividad se puede potenciar tanto en el entorno escolar como en el entorno familiar. Las siguientes son algunas actividades centradas en la estimulación de la creatividad en niños.  

 

¡A pintar!

 

Una de las actividades en las que realmente, un niño puede liberar todas sus capacidades, es la pintura. A ellos les encanta pintar, debido a que el papel en blanco les ofrece una total libertad para plasmar sus ideas.

En cuanto al impacto de la pintura en la creatividad, se trata de un proceso en el que el niño toma decisiones de manera constante, plasmando en la realidad ideas abstractas, lo cual supone un estímulo para sus capacidades creativas. 

 

Juegos con palabras

 

Una de las fuentes creativas más importantes proviene del lenguaje. El simple uso cotidiano del lenguaje es una actividad que requiere de un esfuerzo creativo constante, por eso los juegos con palabras van a suponer un refuerzo para su capacidad creativa.

Desde los juegos de palabras encadenadas, en los que debemos decir una palabra que empiece con la misma letra con la que acaba la palabra anterior, hasta los juegos de fichas con palabras, cualquier actividad relacionada con el lenguaje va a suponer un estímulo para su creatividad. 

 

Crear historias

 

Al igual que la pintura, crear historias supone la posibilidad de plasmar ideas abstractas en palabras, utilizando la creatividad. Los juegos de historias en grupo en los que varias personas imaginan un mismo relato, son una actividad perfecta para niños.

También existen juegos en los que el niño recibe parte de una historia y debe imaginar cómo continúa en base a sus propias ideas.  

 

Puzzles

Los puzzles son actividades que requieren de una estrategia creativa. A pesar de que las piezas encajan de una manera determinada, la composición de puzzles supone un estímulo para su imaginación y para su creatividad, debido a que el niño va a tomar decisiones de forma continua, hasta completar la actividad. 

Los puzzles son mucho más que un pasatiempo, se trata de una actividad que podemos compartir con ellos y que va a estimular sus capacidades creativas. 

 

Escuchar música

 

Son múltiples los estudios que han analizado el impacto de la música en los niños, y en todos ellos se establece una relación entre la música y la creatividad. No es necesario que un niño se convierta en un músico virtuoso para aprovechar las ventajas de la música, es suficiente con que escuche todo tipo de canciones de forma habitual, para que sus capacidades se potencien. 

 

Jugar a videojuegos

 

Los videojuegos han pasado de ser un pasatiempo que, en muchas ocasiones, percibíamos como algo negativo, a ser un medio perfecto para que desarrollen su creatividad.

A diferencia de muchas actividades analógicas, los videojuegos no solo ofrecen una opción válida, sino que suponen un reto que se puede resolver de distintas maneras, incentivando el pensamiento lateral.  

 

Juego libre con otros niños

 

En ocasiones, se nos olvida que los niños tienen la suficiente capacidad como para imaginar otros mundos en compañía de niños de su edad. Los juegos con otros niños en los que tienen que utilizar su creatividad para disfrutar y llegar a acuerdos son el mejor medio para que mejoren su capacidad de creación, mediante el juego y la colaboración con otros niños. 

 

Las ventajas del pensamiento lateral en niños

 

El concepto de pensamiento lateral está muy asociado a las capacidades creativas y empieza a desarrollarse durante sus primeros años.    

Lo que conocemos como pensamiento lateral es una capacidad para resolver problemas de manera creativa. Muchas de las circunstancias a las que nos enfrentamos en nuestro día a día requieren de respuestas no convencionales o, que al menos, no están dadas de antemano, mediante el pensamiento lateral somos capaces de ofrecer soluciones adecuadas, que no son las habituales pero son igualmente efectivas. 

Las actividades para desarrollar la creatividad en niños pequeños ayudan también a mejorar su pensamiento lateral, generando una serie de estructuras lógicas con las que son capaces de generar ideas y soluciones con las que a veces nos sorprenden. 

La creatividad y el pensamiento lógico son dos conceptos muy relacionados, la lateralidad a la hora de tomar decisiones es una herramienta que resultará muy útil en su vida adulta y que podemos estimular desde edades tempranas. 

 

Actividades creativas en Newton College

 

En Newton College sabemos de la importancia que tiene para su futuro los valores relacionados con la creatividad, por eso nuestros programas educativos siempre incluyen actividades creativas, con las que nuestros alumnos aprenden a tomar sus propias decisiones poniéndolas en práctica.

 

Los procesos creativos están presentes a lo largo de todo el período educativo, dejando libertad al alumno para que descubra su propio potencial.